Osasuna ha completado uno de los entrenamientos más especiales de la temporada con la presencia de 5.065 niños en las gradas de El Sadar. Estos pequeños aficionados, alumnos de los 40 centros educativos que han participado en el proyecto educativo de la entidad Aula Rojilla, han animado a los jugadores durante una sesión de trabajo que se ha enmarcado en la preparación del duelo ante el Athletic Club, que tendrá lugar el próximo sábado a las 21:00 horas en San Mamés.

Aula Rojilla es el proyecto educativo de la Fundación Osasuna que se desarrolla en centros de Navarra a lo largo del curso escolar, en concreto, durante un mes en cada colegio y que se dirige a alumnos de 6 a 12 años.

El objetivo es el conocimiento del club a través de las materias de dibujo, lenguaje y práctica deportiva a través de diferente material escolar que reparte la entidad rojilla en los centros.

Aimar Oroz se entrenó con el grupo con lo que se abren sus opciones para estar por lo menos entre los convocados para el partido del sábado en San Mamés (21.00). El futbolista de Arazuri recayó el 12 de abril de una lesión muscular en el recto anterior de la pierna izquierda, la misma zona en la que tuvo otra lesión en marzo, y desde entonces ha sido trabajando en su recuperación, alterándose en alguna ocasión sus previsiones de reincorporación al grupo. Aimar Oroz lleva más de un mes en blanco, ya que su última participación con el equipo se remonta al 30 de marzo, cuando disputó 34 minutos en la victoria en Almería (0-3).

El retorno de Oroz es una buena noticia para Osasuna, porque el retorno de un futbolista de calidad también le puede ayudar a darle otro aire a este final de curso por ahora tristón. Otra cosa será que su participación tras un mes de ausencia deba ser medida.

Aimar, como el resto de sus compañeros, vivió un entrenamiento especial por el escenario, El Sadar, pero sobre todo por la presencia de miles de jóvenes aficionados rojillos en las gradas. A efectos prácticos, además de un ambiente fantástico para una sesión de entrenamiento de miércoles por la mañana, cada jugada fue jaleada, cada circunstancia especial también elevó el volumen anímico y los decibelios y, por supuesto, se cantaron con fuerza todos los goles. Y hubo siete. 

Arrasate montó un partidillo diez contra diez –no hay más personal– a lo ancho del terreno de juego y los jugadores se mostraron proclives para marcar. Por el equipo ganador –3-5 terminó– marcaron tres veces Xabi Huarte y dos Raúl García. Rubén Peña, Iker Muñoz y Max Svensson fueron los otros realizadores. Fuera de El Sadar, Unai García y Moi realizaron trabajo individual en Tajonar, y David García, Budimir y Barja siguieron con sus procesos de recuperación.

Este jueves el equipo volverá a ejercitarse en Tajonar a partir de las 10:30 horas. El entrenamiento del viernes, previo al partido, será el único de la semana que tenga lugar a puerta cerrada.